Aunque ya el vermut sea una religión por sí solo, y la manera clásica de tomarlo con su aceituna pinchada en un palillo y su rodajita de naranja nos encante, unos amigos me han enseñado un par de recetillas de cócteles con vermut para esos momentos en los que apetece sorprender a tus amigos e innovar un poco.
Empezamos con el tradicional yayo madrileño. Para quien no lo sepa, el yayo es uno de los cócteles viejunos más típicos de Madrid que, aunque fue olvidado durante mucho tiempo, ha resucitado pero bien, convirtiéndose en la bebida moderna del momento. Si quieres convertir tu salón en un antiguo bar de los de siempre, de los de servilleteros plateados y palillos, sólo tienes que mezclar en una copita de jerez con unos hielos y una rodajita de naranja una parte de vermut con media de ginebra y completar con gaseosa bien fría. Unas patatillas con limón o unas aceitunas y ya estás en el típico bar de Malasaña con servilletas en el suelo. Ojo, que los yayos, aunque muy ricos son traicioneros y ¡se suben de golpe a la cabeza!
Si queremos refrescarnos, nos podemos lanzar a preparar un cobbler, es decir, un cocktail estilo mojito: con base de fruta, mucho hielo picado y gaseosa. Una versión que queda riquísima con el vermut es machacar al fondo de un vaso ancho y alto unas rodajas de naranja con menta y un poco de azúcar moreno, le añadimos una cucharada de sirope simple de jengibre y removemos. Llenamos el vaso con hielo, echamos dos partes de vermut y rellenamos el resto con gaseosa, ¡y listo! El sirope simple, aunque también los tenemos listos para comprar de infinidad de sabores, lo podemos preparar nosotros. Sólo hay que poner la misma parte de agua que de azúcar en un cazo al fuego y añadirle el sabor que queramos, en este caso unos tres cuartos de taza de jengibre, lo dejamos a fuego muy, muy suave hasta que reduzca y tengamos un sirope de color claro y bastante líquido. Estos siropes son muy usados en coctelería, pero también para endulzar cafés y otros postres, no dudéis en hacerlo porque se conserva durante mucho tiempo. Sin duda este mojito de vermut es lo más refrescante que vas a tomar y, si tienes una celebración con muchos invitados es un cocktail resultón y fácil de tener para mucha gente.
Y por último, el cóctel de los momentos especiales, el que hará que tu aperitivo en casa de la una de la tarde se convierta casi, casi en uno de los mejores brunchs. El Presidente es el cóctel favorito de una de mis amigas, por eso lo conozco. Por lo visto, surgió en Cuba, en los tiempos que los americanos viajaban a los países colindantes para poder evadir la ley seca. La manera tradicional de prepararlo es mezclar una parte de vermut con una y media de ron blanco y unas gotitas de granadina para que coja un color bien rojo. Se sirve en una copa de cocktail enfriada con hielos y con una cáscara de naranja. Es un cocktail fuerte pero dulce, perfecto para abrir el apetito antes de la comida.
Además, como nos vamos de vacaciones en breve, ¡nos hemos venido arriba y hemos puesto un 5% de descuento en toda nuestra sección Aperitivo de verano! Está disponible desde hoy miércoles 12 hasta este viernes 14 a las 23.59 de la noche. ¡Es el momento para que probéis todo! Desde que os hagáis con un buen vermut para estos cocktails, unos patés deliciosos para picotear (como el ibérico, que es delicioso!) o un salchichón de Vic a la pimienta que se convertirá en la estrella de tu mesa. ¡No os lo perdáis!